No alcanzaban a ser las 5 de la madrugada del domingo, cuando una llamada telefónica interrumpió la calma de la 37 Comisaría de Vitacura: desde el condominio Santa María Polo Golf, de la misma comuna, un conserje solicitaba refuerzos policiales, porque un puma salvaje se andaba paseando por los jardines del recinto. “Creo que el animal se detuvo frente al conserje, justo en la puerta. Menos mal que la tenía cerrada. Fue en un edificio del fondo”, comentaron desde la conserjería del condominio la tarde de este domingo.

El felino infiltrado era una hembra de unos 40 kilos que, se especula, bajó desde el Cerro Manquehue y sobrepasó las rejas del condominio que se encuentra en una de las laderas.

“Efectivamente se encontraba un puma, el cual, según las características, podría haber sido un adulto. El hecho da comienzo a un protocolo, en donde se toma contacto con el zoológico del Parque Metropolitano y en donde además el personal nuestro del Gope concurre al lugar, a fin de permitir un perímetro de seguridad”, dijo el capitán de la comisaría a cargo del procedimiento, Luis Avilés.

A pesar de todo el despliegue de efectivos, la búsqueda del puma pasó inadvertida para los vecinos que a esa hora aún dormían. “Nadie se percató. No hubo tanto revuelo”, dice Alejandra Montalba, directora del Zoológico Nacional, quien acudió al lugar. “Recibimos un llamado a las 6 AM por parte de Carabineros de Chile, para pedir nuestro apoyo en la contención química (adormecer al animal a través de dardos tranquilizantes) de un puma. El animal estaba en un jardín del condominio. El problema es que el jardín era muy extenso y nosotros, como veterinarios, preferimos no dardear a un animal que puede correr muchos kilómetros antes de que la anestesia haga efecto. Es un riesgo. Imagínate que si no lo podemos rastrear, podría caerse al agua y ahogarse o despertar al lado de una casa. Por lo tanto tratamos de acorralarlo, pero el animal empezó a correr. Se fue a los cerros y a las 8 ya ni siquiera estaba visible”, dice Montalba.

“El animal se detuvo frente al conserje, justo en la puerta. Menos mal que la tenía cerrada”.
Conserje del condominio Santa María Polo Golf.