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F. Fuentes y P. GutiérrezEra justo el mediodía del jueves y en la Unidad de Concesiones del Ministerio de Obras Públicas (MOP), una decena de personas se reunía para asistir al último hito administrativo del proyecto más importante de esta década: la licitación de la asesoría técnica para el proyecto Américo Vespucio Oriente (AVO), entre El Salto y Príncipe de Gales.
Siguiendo el reglamento, ese día el presidente de la comisión evaluadora, Carlos Contreras, esperó hasta las 12:00 para ordenar el inicio del proceso.
Si bien la premura no se notaba en los rostros de los presentes, el apuro del MOP se podía palpar: por intrascendente que parecía el trámite, era la última responsabilidad que le cabía a la cartera en torno al proyecto.
A partir de entonces, el éxito o fracaso de AVO -de casi US$ 930 millones de costo y un subsidio equivalente a US$ 200 millones- fue puesto por el MOP en manos del consorcio español que se lo adjudicó en enero pasado, la sociedad OHL-Sacyr. Pero para poner en marcha el proyecto, el consorcio deberá superar duros escollos de aquí a mediados de 2015.
Así al menos lo revela el último Informe al Directorio de Concesiones, que en el capítulo dedicado a esta iniciativa califica como los principales problemas el plazo para culminar la ingeniería definitiva y para tramitar la Resolución Ambiental, aún en “versión 0”, según reza el documento.
Consulta ciudadana
Durante la segunda semana de junio, ejecutivos de la concesionaria visitaron a las autoridades y técnicos del MOP para exponer sobre los avances del proyecto. En los encuentros, dieron cuenta de novedosa tecnología “tunelera” y de los avances en las gestiones para levantar financiamiento en el exterior.
Sin embargo, todas las autoridades consultadas por “El Mercurio” aseguran que los ejecutivos hicieron hincapié en que el nudo más complejo radica en el desarrollo del Estudio de Impacto Ambiental (EIA), que en forma inédita AVO deberá tener.
De hecho, cuentan hasta el tercer trimestre de 2015 para concluir el EIA. Pero, “a la luz de la experiencia en este tipo de procesos, el plazo aparece como casi insalvable, sobre todo por el entorno social del sector”, comentó Patricio Herman, presidente de Ciudad Viva.
Otra dificultad es la consulta ciudadana del EIA. Como se trata de un sector que ya en dos ocasiones logró postergar la iniciativa, tanto el MOP como la concesionaria prevén dificultades.
Esto, porque los cambios al proyecto exigidos por la comunidad como mitigación ambiental no podrán exceder el 25% del costo total -en cuyo caso la obra no se ejecutaría- y se piensa que serían muchos y caros.
Plazos
Tras adjudicarse el negocio el 13 de marzo pasado, Sacyr-OHL cuenta con un plazo de nueve meses para presentar el proyecto vial definitivo. A juicio de especialistas y operadores de concesiones, si se incluyen todos los elementos que la propuesta inicial no consideró, sería una hazaña llegar con el proyecto definitivo antes del 13 de marzo de 2015.
Túneles
El tercer obstáculo, pero menos dificultoso a juicio de los oferentes, son las complicaciones estructurales que deberá resolver la concesionaria (ver infografía).
Entre ellas, destaca la diferencia de profundidades que los nueve kilómetros de vías subterráneas presentan: como ejemplo, una de las principales contingencias que se deben superar radica en la pendiente que tendrán los túneles de transición que pasarán bajo el río Mapocho, a la altura de Monseñor Escrivá de Balaguer.
Ahí, los exámenes preliminares detectaron que para pasar de una profundidad de casi 30 metros, bajo el río, a otra de 20 metros, la rampa de conexión debiera construirse con una pendiente difícil de sortear por un vehículo convencional. Frente a ello, la solución planteada apunta a extender el túnel, pero ello requeriría más gastos.
No obstante, en la cartera aseguran que por tratarse de un proyecto “crítico”, ni los precios finales acordados ni los plazos concedidos serán modificados por el MOP.
De hecho, el ministro de Obras Públicas, Alberto Undurraga, dijo que “las obras públicas son obras de Estado, y trascienden a los gobiernos. En ese marco, esperamos se siga el proceso como está estipulado”, sin abrirse a permitir cambios.
Por su parte, la ex titular de la cartera Loreto Silva defendió su decisión de apurar la licitación en 2013: “Se trata de un proceso serio y responsable, donde incluso se hizo el proyecto paisajístico. Tenía suficiente garantía para ser licitado y se entregó con un nivel de ingeniería que se espera para ese tipo de proyectos”.
Los ejecutivos de Vespucio Oriente S.A. prefirieron no comentar las complejidades que enfrentan.
La visión del Informe del MOP:
Tipo de vía: Autopista urbana
Sociedad concesionaria: Vespucio Oriente S.A. (Sacyr-OHL)
Costo total: UF 21,9 millones / US$ 930 millones
Entrega: 8/8/2020
Inicio concesión: 13/3/2014
Avance físico a la fecha: 0%
Problemas: “Medioambiental, segunda Resolución Ambiental en versión 0”.
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