Vespucio Norte fue una de las cuatro autopistas concesionadas evaluadas. De manera general, los usuarios criticaron las tarifas de los viajes.

vía El Mercurio.com – El periódico líder de noticias en Chile

Un estudio elaborado por la consultora Pullen & Dockendorff -asociada a una red internacional del rubro- analizó a cuatro autopistas urbanas y una interurbana, para determinar su aceptación social y el riesgo de rechazo. El resultado: aunque las autopistas concesionadas son aceptadas por los usuarios, el primer reclamo está asociado a las tarifas.

En dicha medición las personas consultadas analizaron 12 atributos de las empresas, de los cuales nueve eran positivos, como la confianza, el diálogo, la reputación, entre otros; y tres negativos, como el abuso, molestias y discriminación.

A la luz de los resultados, “la gente está dispuesta a usar las autopistas y a tener estas carreteras en su comunidad”, concluye William Pullen, uno de los investigadores del estudio.

Además, los resultados demuestran que las autopistas son percibidas como entidades que contribuyen a la sociedad, al bienestar de las comunidades y al desarrollo económico.

En lo que se refiere a la reputación de este tipo de vías, el análisis determinó que están bien evaluadas. “Lo que los encuestados miden es la solidez, el tamaño y la trayectoria de las compañías. En eso piensa la gente cuando se refiere a reputación. No tiene que ver con el impacto de la compañía en su vida cotidiana”, precisa Pullen.

Factores negativos

El problema es que, junto con esta visión positiva, las autopistas alcanzan altos puntajes en la dimensión que el estudio llama consideración y estrés, “relacionada con molestias, discriminación y abuso”.

Tampoco son percibidas como entes dialogantes, “y esa es una condición que se repite en todas las industrias mal evaluadas. Las autopistas no escuchan, no están muy dispuestas a oír las sugerencias de sus usuarios”, dice Pullen.

El abuso, como característica consultada en el estudio, está asociado al valor de las tarifas, según la percepción de los encuestados.

De hecho, al analizar individualmente a Vespucio Norte, Vespucio Sur, Costanera Norte, Acceso Sur, Ruta del Maipo, en todas encabeza la exigencia de los usuarios por bajar los precios de los viajes.

Según explica Pullen, aunque los contratos de las concesionarias con el Ministerio de Obras Públicas autorizan a las empresas a efectuar alzas anuales, a través de una fórmula determinada, “desde la lógica del servicio, la ciudadanía encuentra que las autopistas son caras y hay congestión”.

A juicio del investigador, en la medida en que “las autopistas no sean capaces de retribuir con un servicio de mejor calidad, no solo en cuanto a tráfico, sino también en iluminación, zonas de descanso, transparencia, pasarelas, van a perder legitimidad”.

Evaluación
Los encuestados miden solidez, tamaño y trayectoria de las compañías.