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Marco Gutiérrez V. 

Apartir de esta semana, la concesionaria española Globalvía -ligada a Fomento de Construcciones y Contratas (FCC) y Bankia- comenzará rondas de reuniones con las principales constructoras chilenas y extranjeras que operan en el país. Ello, para anticiparles detalles de la licitación de las obras por unos US$ 230 millones ligadas a la próxima transformación del tramo interurbano de 15 kilómetros en la Ruta 5 Norte, entre el enlace Buenaventura en Américo Vespucio y el peaje Lampa, a una vía con características de autopista urbana.

Esta será una de las obras de concesión vial más importantes que se desarrollarán en los próximos meses. Pese a que aún debe oficializarse el acuerdo suscrito en octubre pasado entre el Ministerio de Obras Públicas y Autopista del Aconcagua, que une Santiago y Los Vilos -y que pertenece a Globalvía-, la empresa hispana quiere activar el proceso previo a la licitación, informándoles a las constructoras de este plan.

Jorge Rivas, gerente general de Conseciones de Globalvía Chile.

El gerente general de Concesiones de Globalvía, Jorge Rivas, comentó que el proyecto se dividirá en tres licitaciones. La primera para la construcción del tramo urbano, luego el desarrollo del sistema de peajes y de tráfico; por último, el reemplazo de la plaza de peaje Lampa por pórticos free flow , aunque mantendrá casetas manuales en los costados de la ruta.

La primera obra y la última podrían quedar en manos de una constructora o consorcio, mientras que el sistema tecnológico ligado a los telepeajes será adjudicado a especialistas en el tema.

A las constructoras se les exigirá tener una capacidad económica que represente el 15% del valor total del proyecto.

“Quizás algunas empresas locales no cumplan con ello, pero las vamos a invitar igual y ellas deberán asociarse con otras que sí tengan ese requisito”, explicó Rivas.

El ejecutivo aseguró que están realizados los estudios ligados a diferentes permisos que requieren estos trabajos. Estimó que la construcción de los 15 kilómetros tardaría unos 28 meses, por lo que el nuevo tramo urbano podría estar operando en 2016 si las faenas parten en la primera parte de 2014.

Las trabajos se financiarán con capital y crédito bancario, recursos que la concesionaria recuperará a través de los peajes cobrados en dicho tramo. Si al 2021 la firma aún no recupera los dineros, la concesión se extendería hasta 2023.

Expansión en Chile

La apuesta de Globalvía en Chile no se acaba con el proyecto del tramo urbano. Jorge Rivas comentó que a la compañía le interesa seguir creciendo en Chile y en otros países -especialmente OCDE-, con compras de activos ligados a carreteras y ferrocarriles.

El ejecutivo señaló que les atrae contar con autopistas que operen con sistemas electrónicos de peajes, pues “nos da las credenciales necesarias para ir por carreteras de otro estándar”. De todos modos, precisó que en Chile no existen rutas disponibles de esas características.

La posibilidad de sumar nuevos activos, sostuvo Rivas, se ve reforzada tras asociaciones con fondos de inversión para la captación de recursos.

Uno de los últimos pasos en esa dirección lo dio recientemente al establecer un acuerdo con el fondo británico USS (Universities Superannuation Scheme), que aportará US$ 150 millones para inversiones.

Previamente, la concesionaria Globalvía suscribió convenios con los fondos de pensiones PGGM (Holanda) y OPTrust (Canadá).

Las Chilcas, con 35% de avance y nuevo plan para Itata

Globalvía también posee la Autopista del Itata o Acceso Norte a Concepción, que tiene un uso intensivo por parte del sector maderero. El gerente de Concesiones de la firma en nuestro país, Jorge Rivas, dijo que quieren impulsar un plan para mejorar aspectos de seguridad de esa ruta, como defensas en las medianas y paraderos de buses para evitar detenciones de vehículos en zonas no autorizadas, entre otros. “Son proyectos no tan significativos en lo económico, pero sí muy relevantes”, dice.

Sobre las obras de mejoramiento de cinco kilómetros de la Cuesta Las Chilcas, Rivas afirmó que los trabajos llevan un avance de 35% y que deberían culminar en octubre de 2014. Dijo que están tomando todas las precauciones junto al Ministerio de OO.PP. y Carabineros para mitigar problemas en vacaciones.

La transformación del tramo urbano

Proyectada en 1994, la autopista Santiago-Los Vilos no incorporó las mitigaciones demandadas por el cambio de uso de suelo de la Provincia de Chacabuco. Hoy presenta escasa conectividad con vialidad local, falta de pasos peatonales y tiene una alta tasa de accidentabilidad, pues de cada cinco días laborales, en cuatro de ellos ocurre un incidente.

Algunas de las obras serán calzada doble con cuatro pistas por sentido, calles de servicio, superficie total de asfalto, modificación de enlaces Buenaventura, Lo Pinto y Batuco-Liray, seis nuevos atraviesos e instalación de barrera de aislamiento acústico, entre otras. La tarificación será por sistema de cobro con TAG. Se instalarán cuatro pares de pórticos (cuatro en cada dirección), más otro par (uno por sentido) en el sector de la plaza de peaje Lampa.