Fuente: La irrupción de los gauchos argentinos en las medialunas del rodeo chileno – El Mercurio

Leonardo Vera Leiva 

Scibilia, a la izquierda, en la monta del caballo chileno “Qué Lolo”, y Salinas, en las riendas de “Mariachi”, vivirán un sueño de correr en el Nacional de Rancagua, en 11 días más.

Hace unos días, sobre las arenas de la medialuna de Nos se produjo una verdadera hazaña corralera. La collera de los jinetes mendocinos Ariel Scibilia (47 años) y Javier Salinas (27), debutante en los clasificatorios zonales, logró un histórico cupo entre las 120 duplas que competirán en la 69ª edición del Nacional de rodeo de Rancagua.

Un hecho inédito, pues si bien ha habido participación argentina en el Champion, las veces anteriores habían sido de meras exhibiciones.

El hito de los gauchos argentinos no es casualidad. Scibilia, el jinete más experimentado de la dupla que irá a Rancagua, lleva más de quince años corriendo y entrenando en la localidad de San Carlos, en Mendoza. Y el principal instructor, y soporte de la irrupción de los corraleros argentinos, es el multicampeón nacional Luis Eduardo Cortés.

“Esto es un premio merecido al esfuerzo y sacrificio de Ariel (Scibilia) y su compañero, que es petisero en el campo. Juntos ganamos varias veces en Mendoza y no es fácil, él le ha metido muchas ganas y harta plata también a este deporte”, explica el “Negro” Cortés.

Los jinetes argentinos atajando en Nos. La dupla será una de las colleras que competirán en el Campeonato Nacional de Rodeo, jornada que comienza el 6 de abril.

La Asociación de Cuyo

A mediados de 2015, la Federación Chilena de Rodeo aceptó una solicitud de la Asociación Cuyana para incorporarse al masivo grupo que habitualmente practica rodeo. “Estamos felices de haber logrado esto, llegar a Rancagua, donde están los mejores corraleros chilenos, es un sueño cumplido. Con el solo hecho de participar ya estamos pagados”, admite Scibilia respecto de su logro.

“De a poco, la Asociación Cuyana se sigue desarrollando, tenemos un calendario de ocho fechas, con jornadas en diferentes clubes entre abril y octubre, y una final en noviembre”, agrega el entusiasta Scibilia, cuyo hijo Facundo, de 16 años, también cabalga.

Hay recintos corraleros en San Carlos de Mendoza, Luján, San Rafael, Tunuyán, San Luis y San Juan, por lo que el crecimiento de la actividad en Argentina parece inevitable.

Este fin de semana, otra collera de Cuyo, compuesta por Luis Aguinaga y Fernando Moreno, también buscó un boleto a Rancagua en el repechaje de Pemuco, última instancia para clasificar, pero los mendocinos no tuvieron suerte.

Mismas reglas

“Antiguamente, el rodeo en Argentina se corría como son los rodeos laborales hoy, pero desde que entraron a nuestra Federación, son los mismos reglamentos y puntajes. La única diferencia es que ellos pueden correr con chaquetillas, no con la manta nuestra. Aunque tienen actividad en el sur argentino, el mayor nivel está en Cuyo”, señala Cortés.