Fuente: El Mercurio.com – El periódico líder de noticias en Chile

Lucía Adriasola y Sebastián Sottorff 

Entre todos los gastos pronosticados para el mes de marzo, hay uno que invariablemente ha invadido la rutina de millones de chilenos: el pago de los permisos de circulación de sus vehículos.

Y pese a que la cancelación de este impuesto representa muchas veces un dolor de cabeza para los automovilistas, lo cierto es que los fondos recaudados por este concepto son ampliamente esperados por las municipalidades del país, pues representan una fuente de ingresos que para varias comunas es una ayuda fundamental.

Sin embargo, no todos los municipios se ven igual de beneficiados gracias al pago de las patentes. Esto, porque solo el 37,5% de lo recaudado se queda en las arcas comunales respectivas.

El resto de los ingresos se destina al llamado Fondo Común Municipal, en el que se redistribuyen los dineros entre todas las comunas del país.

Así, y tras un análisis de los presupuestos comunales del año anterior en la capital, se pudo comprobar que solo el 9% de los fondos anuales provienen del pago de patentes.

En ese sentido, son Vitacura, Las Condes y Lo Barnechea las comunas que más dinero recaudaron en 2015 gracias a los permisos de circulación. La cifra es mayor en comparación a lo recolectado por comunas más pobladas, como Maipú y Puente Alto.

De hecho, esta última es la que tiene el parque automotor más amplio de toda la capital, con más de 118 mil vehículos, y solo recaudó $10 mil millones, versus los $15 mil millones que se captaron en Las Condes con poco más de 112 mil autos.

Lo anterior, según explica el director del Instituto Chileno de Estudios Municipales (Ichem), Camilo Vial, se daría por la posesión per cápita de autos por familia en estas comunas, que son de altos recursos.

“Además de la cantidad de autos, estas comunas tienen un despliegue muy importante de puntos para pagar los permisos, lo que facilita el trámite a sus vecinos”, señala Vial.

A su vez, el académico agrega que, en teoría, estas comunas poseen autos más caros y, por ende, pagan permisos de circulación que implican valores más elevados.

En relación al impacto que las patentes tienen en el erario municipal, Vitacura es la comuna donde el pago de este impuesto influyó más en el presupuesto comunal de 2015, pues el 22% de todos sus fondos se generaron gracias a este concepto. Algo similar ocurre en Peñalolén, Macul y La Reina, donde el 20% de sus arcas comunales provienen de los permisos de circulación.

En cambio, para municipios como Santiago y Las Condes, solo el 5% de todo su presupuesto se genera a través del pago de este ítem.

Destino de los fondos

Originalmente, este impuesto fue creado para mejorar calles y construir obras viales. Sin embargo, los fondos captados por los permisos de circulación hoy son utilizados de manera variable por cada municipalidad. Así al menos lo reconoce el alcalde de Colina y presidente de la Asociación de Municipios de Chile, Mario Olavarría.

“Como estos permisos pasan al presupuesto del municipio, el alcalde con el concejo deciden en qué se destinan, de acuerdo a las necesidades de la comuna. Normalmente, municipios más pequeños no tienen recursos para hacer grandes proyectos, entonces con esas platas mantienen los servicios de iluminación, áreas verdes, pago de remuneraciones, etcétera”, explica Olavarría.

En este sentido, tanto Olavarría como el alcalde de Macul y presidente de la Asociación Chilena de Municipalidades, Sergio Puyol, recalcan la importancia de que los vecinos contribuyan pagando sus permisos de circulación en sus comunas, para el desarrollo de las mismas.

“Es un sentimiento de pertenencia decir, por ejemplo, ‘¡yo pago mi permiso en Macul!’. Cada persona debería pagar su permiso en su comuna, ya que es parte importante del presupuesto total”, señaló Puyol. Olavarría, en tanto, destacó que a medida que más usuarios paguen, más holgura financiera tendrán las comunas para ejecutar proyectos.

Plazos
Los permisos de circulación pueden pagarse hasta el 31 de marzo.