El norte se pega un respiro

Ana María Córdova, doctora en Ciencias con mención Meteorología de la Universidad de Sao Paulo, Brasil, realiza un pronóstico más positivo con respecto a esta semana en la zona central y el norte del país. “El frente que acabamos de vivir ya pasó. Se espera que en el norte los cielos estén despejados en los próximos tres días, pero con la clásica nubosidad. En la precordillera y el valle central caerán algunos chubascos durante este martes”.

Lluvia a partir del 16

Para Jason Nicholls, meteorólogo de AccuWeather, las lluvias no darán tregua desde la próxima semana. “La llovizna en Antofagasta caerá alrededor del 16 o 17 de agosto. No puedo ser más específico en un rango más largo, que no sea el patrón de humedad. Para el caso de Valparaíso y la Región Metropolitana, la llovizna vendrá durante o después de la semana del 24 de agosto”.

El Niño tomó cuerpo

Abraham Levy, meteorólogo peruano, es más jugado en su pronóstico. El experto asegura lluvias a partir de la próxima semana. “El fenómeno de El Niño está en pleno desarrollo. Está creciendo y lo seguirá haciendo según los modelos que simulan las condiciones del Océano Pacífico. Tendremos lluvias durante fines de agosto y septiembre”, vaticina. Agrega que “el anticiclón tendrá un acercamiento a las costas de Chile, este tiene una entrada y salida, y una vez que sale entran las bajas presiones y ahí vienen las lluvias. Pero es demasiado prematuro anticipar de qué magnitud será”.

Por debajo de la meta

Gianfranco Marcone, meteorólogo de Infoweather, anticipa lluvia para hoy martes o mañana miércoles. “Se viene una precipitación sólo para la zona central, pero jamás en las dimensiones de la semana pasada. A lo más caerán unos 10 milímetros. A pesar de la lluvia que ha caído aún estamos un 35% bajo lo normal en lo que respecta a la zona central”.

El calentamiento global

El geógrafo de la Universidad Católica Pablo Osses es categórico. “Es altamente probable que veamos con más frecuencia estas violentas precipitaciones en el norte. El calentamiento global del planeta hace que el ajuste climático vaya hacia eventos cada vez más intensos. En ese sentido tenemos que pensar de otra manera cómo estamos construyendo las ciudades”.