Santiago, 4 de septiembre de 2014.- Con la intención de reafirmar su presencia en el mercado nacional, la marca inglesa Land Rover, realizó una prueba de manejo en el circuito off road de Outlife para la prensa especializada. En esta ocasión, el modelo elegido fue  el exitoso SUV Freelander II, un ícono de la firma de lujo reconocido a nivel mundial por su trayectoria de calidad, seguridad, diseño y confianza.

Las vacaciones de invierno y las salidas de la ciudad son el momento perfecto para poner a prueba las características y funcionalidades del modelo Freelander II. Land Rover –representada en Chile por Ditec Automóviles- es una de las marcas líder en el segmento SUV de lujo en el mercado nacional: en 2013 se comercializaron 665 unidades. En esa línea, el modelo Freelander II, reconocido como un ícono de la firma de lujo a nivel mundial por su trayectoria de calidad, seguridad, diseño y confianza, alcanzó los 176 vehículos vendidos durante el año 2013.

El gran éxito del Freelander II, tanto en Chile como en el mundo, ha motivado a la compañía inglesa a potenciar este modelo, lo que no sólo se reafirma el gran estilo y diseño único, sino que también demuestra sus prestaciones, seguridad, confort y lujo. El equipamiento interior del vehículo alcanza importantes niveles de calidad, gracias al cuadro de mandos, pantalla multifunción táctil de 7 pulgadas, y un impresionante equipo de audio Meridian. Al moderno sistema de arranque sin llave se suma un freno de mano eléctrico “inteligente” que ajusta el nivel de presión dependiendo de la pendiente en la que esté estacionado el auto. Opcionalmente se puede incorporar una cámara trasera que presenta la imagen en la pantalla acompañada de líneas dinámicas que constituyen los límites del vehiculo y la predicción de movimiento para cuando se dé marcha atrás, entre otros.

Freelander II ha conseguido 5 estrellas en el prestigioso EuroNCAP en cuanto a nivel de seguridad de pasajeros. Como el SUV más competente de su categoría, este vehículo entrega gran eficiencia y capacidad en todo tipo de terrenos, tanto en carretera como fuera de ella, una cualidad que sólo un Land Rover puede ofrecer. Así, este vehículo se lució en el circuito de Chicureo donde los imponentes detalles exteriores entregaban una imagen agresiva pero sofisticada a la vez: su mayor iluminación con tecnología LED, una firma visual en los faros delanteros que destacan en el frontal, y las llantas de 17´´que están disponibles de serie.

Un interior full equipado

Pensando en el invierno donde los paseos outdoor, como ir a la nieve son una buena excusa para manejar un Freelander, las opciones de equipamiento brindan una gran cantidad de beneficios al cliente: el habitáculo de diseño contemporáneo presenta  un cuadro de mandos y el dial del sistema de Terrain Response^® se sustituyó por interruptores, lo que permite mayor espacio y limpieza en éste.

La seguridad se ve reforzada con un freno de mano inteligente que ajusta el nivel de presión según la pendiente en la que el vehículo esté estacionado. El sistema es tan “smart” que incluso reacciona de modo diferente si los frenos están calientes o fríos. Aunque se controla con un sencillo interruptor, el freno de mano eléctrico puede seguir usándose como freno de emergencia, seleccionando automáticamente el método más estable de detención empleando las técnicas de prevención de derrape. Además, el freno no se puede soltar si es que el asiento del conductor no está ocupado.

Este SUV cuenta con un sistema de audio Meridian de 380 W, un equipo de alta fidelidad que se controla desde la nueva pantalla táctil multifunción de 7´, y ofrece 11 altavoces que proporcionan una excepcional calidad de sonido. Además posee subwoofers y un sistema de multi-ecualización Audyssey.

Motores: eficiencia, economía y bajas emisiones.

Freelander II viene  de  la mano de un eficiente motor  bencinero 2.0 Turbo  (240CV) de 4 cilindros en línea, el cual remplazó a su  anterior motorización de 3.2 litros y 6 cilindros.  Este motor, junto con mejorar el performance de su antecesor,  entrega una conducción más suave, dinámica y eficiente a  sus usuarios.

Los clientes de Freelander II pueden seguir eligiendo además el sobresaliente motor diésel, el 2.2 litros y 150CV (TD4). Equipado con un sistema de transmisión de 6 velocidades, es capaz de ofrecer un impresionante consumo de7,0 l/100km y emisiones de CO₂  de 185 g/km

Todos los Freelander poseen Sistema Intelligent Power System Management (IPSM) que incluye Smart Regenerative Charging. Esta función asegura que el alternador cargue la batería cuando el vehículo está desacelerando, recuperando la energía cinética en lugar de consumir combustible para ello.

El sello Land Rover se hace presente en todas las versiones comercializadas en Chile ya que vienen con tracción 4×4, equipados con el mismo sistema todoterreno inteligente, líder de su categoría: Terrain Response^®. Éste responde a los cambios de terreno en 150 milisegundos para ajustar el par motor entre los ejes delantero y trasero. Además, optimiza los sistemas electrónicos para condiciones extremas a través de cuatro posibilidades de ajustes: Conducción Normal; Hierba-Gravilla-Nieve; Barro y Roderas; y Dunas-Arena. El control Gradient Release permite un arranque suave para una seguridad total en cualquier superficie.

Los diversos sistemas de ayuda a la conducción ofrecen una “red de seguridad extra” para los ocupantes: Sistema ABS, Control de Tracción Electrónico (ETC), Sistema Electrónico de Distribución de Frenado (EBD), Control de Frenada de Curvas (CBC), Asistente de Freno de Emergencia (EBA), Control Dinámico de Estabilidad (DSC), Control de Estabilidad Antivuelco (RSC), Control de Par Motor (EDC) y 7 airbags: dos frontales, dos al nivel del tórax, dos laterales y uno para el conductor al nivel de las rodillas.

Freelander II está disponible para su venta en Chile en tres distintas adaptaciones, con dos motores: bencinero 2.0T Si4 (versiones SE y HSE) y diésel 2.2 TD4 (versión SE), a partir de $25.990.000, además para todas las versiones se puede configurar el equipamiento Sport.