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ÓSCAR SAAVEDRA 

Verónica Terán sale al patio de su hogar en el condominio Hacienda Chicureo, y mira sus gallinas. Cuenta que desde que llegó a vivir allí, hace ocho años, ha hecho todo lo posible por protegerlas de las aves rapaces que sobrevuelan por Colina. Hoy, con el resto de sus vecinos, está en medio de una contienda judicial con la empresa Chilectra para salvar precisamente al depredador de sus animales.

La empresaria, propietaria de una productora de TV, es parte de la comunidad que se opone al proyecto que instalará una subestación eléctrica y torres de alta tensión en los alrededores del condominio en que también residen el actor Benjamín Vicuña y su esposa Carolina Ardohain; el conductor de TV y columnista Vasco Moulian, y el periodista Marcelo Comparini.

Hace casi dos meses, los vecinos de Hacienda Chicureo presentaron un recurso judicial ante la Corte de Apelaciones de Santiago para intentar paralizar las obras del proyecto. Dicen que supieron por casualidad de los trabajos, porque a uno de los residentes le llamó la atención un movimiento de tierra en los cerros colindantes.

Terán, casada y madre de cuatro niños, señala que “nos enteramos de la construcción de la subestación eléctrica por la curiosidad de un vecino. Todo ha sido como escondido, no hay un letrero que exponga lo que se está haciendo”.

Aclara que “sabemos que es urgente la energía eléctrica, no estamos en contra de que hagan lo necesario para generar o traer más energía a la zona, lo que nos molesta es la forma en que esto se ha llevado a cabo, no el fondo”.

Otro vecino que se resiste a la idea, Roberto Bianchi, alega que “en esto, la empresa jamás ha tomado en consideración a la comunidad, dispuesta a que se busque una alternativa para que se produzca electricidad, pero preservando lo que hemos intentado resguardar: la flora y la fauna del lugar”.

Ángelo Rossi, quien vive allí hace tres años, explica que “en el condominio no hay postes, todo ha sido instalado en forma subterránea, pues nos interesa el cuidado del ecosistema. Por lo mismo es que lo único que pedimos es que se tome en cuenta esto, y se realicen las obras para aminorar los posibles daños”.

El abogado que representa a los vecinos, Lorenzo Soto, sostiene que el proyecto no cuenta con la autorización correspondiente: “Se separó la subestación de la línea eléctrica desde el punto de vista del permiso y evaluación medioambiental, cuando es un solo proyecto. Esto es lo mismo que impidió que se efectuara la Central Castilla”.

“Chilectra solo sometió a evaluación la línea eléctrica. La subestación no tiene ni evaluación ni permiso ambiental, por lo que no se sabe el efecto de la obra”, agrega el profesional que representa a los vecinos.

Consultada al respecto, la empresa Chilectra indica que el proyecto está actualmente radicado en la vía judicial y que se espera la resolución de los tribunales.

Añade que la compañía siempre ha estado abierta a conversar con los vecinos y que aún está disponible para hacerlo. También precisa que el proyecto sigue en marcha, que tiene todos los permisos requeridos y que no es distinto a otros que se han efectuado en el resto de las comunas de la región.

Diez torres se ubicarían cerca del condominio, según los vecinos.