En el comité político del lunes en La Moneda, el hoy vicepresidente, Andrés Chadwick, notificó a los dirigentes de la Alianza que Punta Peuco sería remodelado. La información sorprendió a las directivas de RN y la UDI, que reclamaban por la decisión -a su juicio “inoportuna”- del Presidente Sebastián Piñera de cerrar el penal Cordillera, donde estaban recluidos varios ex jefes de la Dina y la CNI.
Según asistentes a la cita, los argumentos que el ministro entregó respecto del cambio en las instalaciones de dicha cárcel de alta seguridad -donde fueron trasladados los nueve militares que habitaban el penal Cordillera- tienen relación con que, según una proyección estimada, unos 25 nuevos reos podrían llegar al penal de Tiltil, luego de que nuevas condenas por casos de DD.HH. sean ejecutoriadas.
De hecho, en el gobierno comentan que el potencial ingreso de nuevos reclusos fue uno de los factores que consideró Piñera al cerrar Cordillera.
Fuentes de gobierno confirmaron a La Tercera que el Ministerio de Justicia instruyó a las unidades técnicas internas y de Gendarmería para trabajar en la elaboración de un plan para la readecuación de Punta Peuco, ante la inminente llegada de más militares. De acuerdo a estimaciones preliminares, el desembarco de los 25 nuevos internos sería a partir del próximo año.
Según las mismas fuentes, para instalar a los nuevos internos se remodelarán 12 módulos que hoy están sin habitar: 10 para ser usados como celdas dormitorios, los que incluyen baños privados, según las condiciones de los centros penitenciarios de Alta Seguridad. Y los dos restantes destinados para espacios comunes.
Al ser consultado por las capacidades del penal, el coronel José Maldonado y presidente de la Asociación Nacional de Oficiales de Gendarmería, señaló que “la Corte de Apelaciones de Santiago resolvió que algunos (módulos) carecían de ventilación y de aislamiento térmico”. Y agregó que, de solucionar esos inconvenientes con la habilitación de los nuevos 12 módulos, el penal podría llegar a albergar a “110” reclusos.
Según informes oficiales, hoy en Punta Peuco habitan 53 internos tras el traslado desde el penal Cordillera. Y para el próximo año aumentaría a 78.
Pese a las críticas surgidas en la Alianza al cierre de Cordillera, encuestas del gobierno -y que Piñera revisó ayer durante el vuelo que lo llevó a Tailandia- señalan un importante apoyo a la decisión.
Informe a Ballesteros
El presidente de la Corte Suprema, Rubén Ballesteros, solicitó motu proprio al ministro que coordina a nivel nacional las causas de DD.HH., Hugo Dolmestch, elaborar una proyección sobre el número de ex militares que podrían llegar al penal de Punta Peuco en los próximos meses.
La cifra deberá tener en cuenta una serie de variables, como qué instancia tendrá la condena o si el ex uniformado está en calidad de procesado. Esto, porque, según la ley, para establecer de manera definitiva la lista de ex militares condenados, cada sentencia debe estar ejecutoriada.
Al ser consultado, Dolmestch confirmó que Ballesteros encargó la estimación y que ésta se encuentra en marcha. El ministro, en todo caso, aclaró que sólo se tratará de una proyección, porque “no podemos saber quiénes van a ser condenados o no”.
En ese sentido, desde el gobierno se informó que entre el 11 de marzo de 2010 y el 30 de septiembre de 2013 se han presentado 662 querellas por violaciones a los derechos humanos. Y que actualmente el Programa de DD.HH. de Interior es parte en 870 procesos judiciales.
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