Las promesas del atletismo europeo tiene una cita entre el jueves 13 y el domingo 16 de julio en Espoo, una ciudad de casi 300.000 personas a las afueras de Helsinki, en Filandia, donde este año se celebra el Europeo sub-23, la última oportunidad para muchos atletas de brillar en las categorías inferiores antes de saltar al nivel absoluto.