OPINION
DE CHICUREO.COM: El sentido de las Zoduc.
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Resulta un tanto raro observar cómo el mercado se ajusta a las necesidades o requerimientos sociales, muchas veces sin interpretar estas fuerzas sino como un buen negocio, soslayando su trasfondo y, en muchos casos, su importancia histórica.
Luego de una reunión que sostuvimos con ejecutivos de una de las inmobiliarias abocadas a este tipo de inversiones, las Zoduc, quedamos de cierta manera desconcertados por la forma en que la demanda ha encontrado en la empresa privada respuestas a sus demandas de vivienda y espacio, con sólo una mínima participación del Estado.
Las Zoduc vienen a reemplazar lo que normalmente se llamaron "poblaciones", o lo que durante mucho tiempo fueron en Santiago los "pasajes". Lugares densamente poblados, con mínimo o escaso territorio para los propietarios y sus familias.
El ejemplo de Colón 8000 hacia arriba es claro. Una urbanización apretada, evitando encaramarse en la loma del cerro, hacinando a la gente en el plano del valle, pero con una demanda fuerte donde actualmente es casi imposible reconocer las casas originales, múltiples veces remodeladas por nuevos o antiguos propietarios que las han adquirido como su opción de vida, adecuándolas a sus necesidades de crecimiento constante.
Al contrario, aquí vemos como, a este segmento de matrimonios jóvenes o personas con ingresos intermedios, se les ofrece el mismo espacio que a los adquirientes iniciales de urbanizaciones como Santa María de Manquehue o El Huinganal, en un entorno natural y con un paisajismo en el que se rescata lo autóctono y las especies nativas. La inmobiliaria con que conversamos no sólo construye sino que reconstruye un habitat previamente azolado y terriblemente eriosonado.
Hay algo que ha cambiado de manera extraordinaria con esta nueva forma de hacer ciudad: no sólo se venden casas, además se vende espacio.
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