En la última década, la minería ha contribuido de forma significativa a la economía peruana. Esta actividad ha representado, en promedio, el 60% de las exportaciones totales, el 11% tanto del PBI como de la inversión privada, el 8% de los ingresos fiscales y el 5% del empleo total. Además, según diversos estudios, la minería incrementa el empleo y los ingresos en otros sectores, reduce la pobreza, e impulsa un mayor rendimiento escolar y el desarrollo del tejido empresarial.