El expresidente estadounidense Donald Trump tiene por delante un 2024 plagado de procesos judiciales. También una larga campaña electoral en busca de la nominación republicana en su renovada carrera por la Casa Blanca. Convertirse en el primer exmandatario en la historia del país en ser acusado penalmente no ha alejado al magnate de capitalizar la polarización social y sacar réditos políticos y económicos de ello. Ad portas del inicio de un año clave, un debate jurídico busca responder una cuestión esencial