La campaña sucia entró de lleno en el debate presidencial previo al balotaje cuando Sergio Massa invitó en reiteradas oportunidades a los espectadores a ver lo que había dicho anteriormente Javier Milei sobre determinados temas conflictivos. Así, el candidato peronista intentó mostrar las contradicciones del postulante libertario: en Google, la primera búsqueda que mostraba la plataforma tecnológica era un sitio sin identificación partidaria, por el que paga Unión por la Patria.