La muerte del opositor ruso Alexéi Navalni, quien falleció el viernes mientras cumplía condena en una cárcel del Ártico, ha provocado en las últimas horas homenajes y manifestaciones de protestas en distintas capitales europeas y también en varias ciudades rusas, donde hay centenares de detenidos. Mientras, la madre del opositor, Liudmila Naválnaya, se ha trasladado este sábado a la localidad de Jarp, donde se encuentra la cárcel IK-3, a la que fue trasladado su hijo en diciembre pasado.