Aunque la muerte de Alexéi Navalny aún es materia de investigación, sus seguidores no han tardado en responsabilizar al Gobierno de Vladimir Putin. Para muchos, la muerte de Navalny guarda muchas similitudes con la de Anna Politkóvskaya en 2006 y Borís Nemtsov en 2015, reconocidas figuras que también plantaron oposición al Kremlin.