El rey Carlos III ha ingresado en una clínica de Londres para someterse a un tratamiento por un problema de agrandamiento de próstata, tal como había adelantado la semana pasada el Palacio de Buckingham, que no ha aclarado cuánto tiempo permanecerá el monarca en el hospital. La Casa Real describió como «benigna» su situación, recordando que se trata de un problema «común» entre hombres que han alcanzado cierta edad –el monarca tiene 75 años–.