Las milicias palestinas matan al menos a 250 personas al infiltrar decenas de milicianos, secuestrar civiles y soldados, y disparar miles de cohetes, en el mayor ataque contra territorio israelí en décadas. Hamás justifica la estudiada operación sorpresa en “los crímenes de la ocupación”. “Estamos en guerra”, declara Netanyahu antes de que el Ejército matara a 232 palestinos en bombardeos