California ha demandado a cinco de las mayores compañías de petróleo y gas del mundo, acusándolas de participar en una «campaña de engaño de décadas» sobre el cambio climático y subrayando que las autoridades estatales se han visto obligadas a desembolsar decenas de miles de millones de dólares para hacer frente a los riesgos y daños que provocan los combustibles fósiles en el medio ambiente.