Hoy se cumplen 30 años de la firma de los Acuerdos de Oslo entre los líderes israelíes y palestinos. Ese pacto, auspiciado por Estados Unidos, se presentó como el inicio de un camino hacia la resolución del conflicto, pero el optimismo de entonces está completamente alejado de la realidad actual, marcada por la ausencia de diálogos de paz, la violencia constante y la expansión de la ocupación israelí.