Hubo un momento en el que la oferta culinaria de los grandes hoteles del mundo era la que marcaba el rumbo y los tiempos de la gastronomía. Esos edificios enormes, lujosos, y “aristocráticos” nacieron en su mayoría entre 1880 y 1920. Recibían y hospedaban a la élite de la sociedad de ese momento. Clientes que necesitaban de lugares acordes a su estatus para descansar de los largos viajes que, en su gran mayoría, realizaban en barcos o trenes ya que la aviación comercial empezó en el año 1920. La comida tenía…
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‘ En San Telmo, el restaurante de un cinco estrellas donde comer desde chivito asado hasta huevo con fondue de quesos