En la esquina de W. de Tata y Cervantes, se encuentra Copetín Fiat, una joyita gastronómica perdida en una esquina de Caseros. Un negocio familiar que funciona desde 1965 y que si bien fue evolucionando, siempre funcionó como despacho de comidas. En sus inicios elaboraban solamente sándwiches de fiambre que vendían principalmente a los empleados de la fábrica automotriz Fiat, que se encontraba justo en la vereda de enfrente. La modernidad y, sobre todo la popularidad que fue adquiriendo este espacio…