Gran conmoción ha causado en la opinión pública la noticia de que en el condado de Orange Florida (EE.UU.) se vetaron 673 libros en las aulas de clases. La medida surgió a raíz de una nueva ley estatal impulsada por el gobernador republicano Ron DeSantis que restringe cualquier material educativo con referencias sexuales o que tengan alguna temática LGTBQ en las salas de clases, según explicó el diario The Hill.