Benjamín Herrera vivió una quinta fecha del Campeonato del Mundo FIM EnduroGP donde la garra y la perseverancia fueron dos palabras clave. Y es que el rider nacional no ha descansado con el fin de posicionarse entre los mejores del mundo, pero tuvo una de las carreras más difíciles en lo que va de año en Eslovaquia. No solo por la lucha entre los contrincantes, también contra su propio cuerpo porque pasó por un complicado estado de salud con síntomas como fiebre y otros malestares.