Dos enigmáticos objetos helados interestelares descubiertos con el telescopio ALMA muestran propiedades únicas que no pueden explicarse por las características de ningún objeto conocido asociado en su clase y pueden así representar una nueva clase de cuerpos celestes. Se cree que las moléculas orgánicas que sirven como componentes básicos de la vida se forman en el espacio, pero sus lugares exactos de formación y los mecanismos de entrega a los planetas siguen siendo un gran misterio en la astronomía…