En el siglo XXI, la tecnología ha permeado cada aspecto de nuestras vidas, revolucionando la forma en que trabajamos, nos comunicamos e incluso cómo cuidamos nuestra salud. La transformación digital en el campo de la salud ha surgido como un avance imprescindible, brindando oportunidades sin precedentes para mejorar la atención médica, agilizar los procesos y aumentar el acceso a servicios médicos de calidad.