Se trata de los hermanos Tania, Jonathan y Alan, de 30, 26 y 24 años respectivamente, chilenos, cuyos cuerpos estaban al interior de dos vehículos que no tenía encargo por robo. El triple homicidio tiene características de crimen organizado. “La forma de la comisión de este ilícito es a golpes, a través de un machete. Todas las víctimas estaban amarradas de pies y manos (…) nos da luces que estamos frente a un ilícito dentro del contexto de crimen organizado“, señaló la fiscal regional Trinidad Steinert.