Partió el 1 de abril recién pasado. Uno de los primeros flancos que deberá abordar es la relación con los funcionarios del Servicio de Impuestos Internos, quienes critican que sea un profesional externo al organismo. También hay dudas sobre su experiencia en temas de fiscalización, aunque sus cercanos afirman que cumple con el perfil para sortear ambas vallas.