El proyecto fue anunciado en septiembre de 2022 y prometía definir en seis meses la nueva tecnología para hacer más eficiente la producción de litio. SQM ha testeado al menos cinco variantes de extracción directa y ha analizado 70 estudios conceptuales. El alto consumo de agua dulce y energía hacen complejo abandonar por completo la evaporación, forma actual de producción.