Los sólidos datos de generación de empleo en Estados Unidos fueron una sorpresa. Se esperaba que las nóminas y la demanda laboral comenzaran a desacelerarse, pero sucedió lo contrario. Lo que este informe deja claro es que el mercado laboral es fuerte, los consumidores están en una excelente posición para seguir gastando y hay pocas señales de recesión, al menos a juzgar por los datos laborales.