António Guterres fue declarado «persona non grata» por el Estado judío tras su denuncia de las masacres en Palestina y el Líbano. La carta pide respeto por el rol de Naciones Unidas, que «es esencial para fomentar el diálogo y promover la paz y el entendimiento entre las partes en conflicto». «Este significativo respaldo es reflejo del mayoritario apoyo de la comunidad internacional a la labor del líder del organismo», relevó la Cancillería chilena.