En las últimas semanas, a una oleada de visitantes internacionales que intentaban entrar a Estados Unidos desde otros países se les ha denegado la entrada en los puestos de control fronterizos, lo que ha derivado en deportaciones a sus países de origen o a días o semanas de detención. Una mujer británica de 28 años llegó al Reino Unido a principios de esta semana después de haber permanecido tres semanas retenida en un centro de detención de migrantes del estado de Washington. Había intentado entrar a…