El estudio de CRU Group destaca que, en un contexto global donde la demanda de cobre sigue en aumento, vinculada a la transición energética y la necesidad creciente de electricidad, Argentina tiene la oportunidad de consolidarse como un proveedor clave del mineral. “La próxima década será crucial para definir si el país logra capitalizar este potencial y transformarlo en un motor de desarrollo sustentable”, plantean. Pero también señala desafíos, como la estabilidad regulatoria y fiscal en el largo plazo…