El consumo con tarjeta en dólares en el exterior llegó en enero pasado a la friolera de US$ 864 millones, casi el doble de los US$ 499 millones de finales de diciembre pasado. El atraso cambiario genera que la utilización de los plásticos prolifere. Y si bien el BCRA decía en un informe de diciembre pasado que el 50% o 60% de eso se paga con dólares del colchón, luego de la quita del Impuesto PAIS, esa relación puede cambiar. Qué pasará con los resúmenes que vencen en febrero será clave.