La acción ha tenido lugar, según el Ministerio de Defensa ruso, en el marco de las pruebas estatales de sistemas de misiles.
Rusia continúa tratando de atemorizar al conjunto de la OTAN. En esta ocasión, el país presidido por Vladímir Putin ha lanzado (a modo de prueba) desde las proximidades de su frontera oeste con Kazajistán un misil con capacidad para alcanzar Europa.