Irrumpió en la escena internacional en 2015, como el joven dirigente recién elegido de Canadá, cuyo padre también había sido un popular primer ministro. Y pasó la década siguiente construyendo una marca en torno a sus posturas como feminista, ecologista, defensor de los derechos de los refugiados y de los indígenas, que perseguía el mismo mensaje de cambio y esperanza que Barack Obama. Aunque recibió críticas aduladoras en los medios de comunicación —incluso por su aspecto de chico de póster—…