El australiano Kai McKenzie ha dado un inspirador paso para volver a disfrutar de lo que tanto amaba surfeando en el mismo lugar donde, tres meses antes, sufrió un brutal ataque de tiburón. El free surfer de 23 años, que perdió una pierna tras el ataque de un gran tiburón blanco en North Wall, decidió regresar a las olas junto a sus amigos y familiares para enfrentar el miedo y seguir adelante. “Solo quería volver a North Wall, sentarme allí y superar esa mierda, luego estaría bien”, comentó McKenzie…