Con una embestida final el estadounidense le ganó por cinco milésimas al jamaiquino Thompson, se llevó el Oro en la prueba madre de los Juegos Olímpicos y le devolvió el reinado de la velocidad a su país. La última vez que un estadounidense se había coronado en los 100 metros en unos Juegos Olímpicos había sido Atenas 2004, cuando triunfó Justin Gatlin.