El consumo de carne vacuna en Argentina se encuentra en una tendencia decreciente desde la segunda mitad del siglo pasado, en la medida en que fue siendo sustituida por otras fuentes de proteínas. Esta tendencia se ve agravada por la actual recesión que está atravesando la economía argentina y que lleva a muchos consumidores a inclinarse por el consumo de pollo y cerdo, siendo estas alternativas más económicas. Como resultado de estos escenarios, en 2024 el consumo de carne bovina en Argentina podría lleg