El presidente no lucía entretenido. Se reunía por primera vez con el primer ministro japonés el viernes cuando una periodista levantó la voz para preguntarle si tenía alguna “reacción” ante la nueva portada de la revista Time. La portada, le dijo la reportera a Trump, muestra a “Elon Musk sentado detrás de su escritorio Resolute”. “No”, respondió Trump secamente. Miró al suelo. Los segundos siguientes se alargaron como una eternidad mientras una intérprete relataba el intercambio al primer ministro, Shigeru Ishiba, en japonés…