Exposición
de Isabel Viviani en El Pueblito de Los Dominicos
Unos cuantos
muertecitos La
llegada de la mariposa monarca*, a fines de octubre, anuncia
la venida de las ánimas.
Los
muertos cobran vida en los recuerdos de los vivos.
Entre
las almas que son esperadas, y los de este mundo, se establece
un diálogo intenso.
Muertos
queridos.
Muertos perdidos.
Muertos antiguos.
Muertos llorados.
Muertos nunca olvidados.
Muertecitos todos que están en nuestra memoria.
El
origen de esta exposición está en la vida misma.
En la celebración de los nuestros que sin estar, están.
Están en nuestra memoria y en nosotros mismos. Es
la muerte enfrentada cara a cara, sin complejos. Con todos
esos cuentos detrás de cada muerto. Con su entorno
y su vida. Con los homenajes que se merecen y merecieron
desde hace tanto. Es la muerte como parte de la vida misma.
(junto
a las obras de la autora se aprecia una serie de candelabros
conmemorativos realizados por 22 pintores (reconocidos) que
fueron invitados a participar en el proyecto)