Nuevamente
esta temporada 2006/2007 los frutales están cargados.
Estamos a mediados de diciembre, los damascos están en
plenitud y Javiera León
(la esposa de nuestro Maestroweb) ya empezó a hacer mermeladas.
Hace algunos años este era
todo un cuento: fuego y olla afuera, más horas de salpicados
y quemaduras, moscas, calor y otros desagrados que llevaron a
simplificar las
recetas
originales de mermeladas para hacerlas simplemente en la cocina,
con los frascos sin desinfectar porque están limpios
(ojo, hoy usamos agua potable, en la mayoría de los casos,
clorada), y cociendo mucho menos tiempo porque, en fin, casi
todos preferimos
las mermeladas un poco más líquidas. Pero igual
eran sus horas en la cocina.
Así,
sin mayores bombos y platillos, Javiera encontró el año
pasado en un supermercado unos disimulados
frascos de "Azúcar para Mermeladas" de IANSA.
Esta es una empresa de reconocido prestigio (al menos en lo que
a productos se refiere).
¿Y cuál fue su atractivo inicial? Un litro —kilo— de
mermelada en ¡10 minutos!
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No más frascos, se utiliza el mismo del producto |
La probamos, agregamos el azúcar
a la fruta y seguimos las instrucciones. Finalmente llenamos
el frasco original hasta el tope —la etiqueta incluso trae
una sección para anotar el tipo de mermelada y la fecha
(igual el frasco se ve más bonito sin la etiqueta de IANSA,
aquí deberían poner algo más de arte)—,
y lo dejamos boca abajo por más de una hora para asegurar
un cierre hermético. Fue todo.
¿El sabor? Rico, sin ese
dejo a recocido que algunas veces toma parte de la fruta cuando
no se revolvió lo suficiente durante la cocción.
Mirando las estadísticas
de Iansagro vemos que la producción de este azúcar
para mermeladas aumentó del 2004 al 2005 de 23 a 28 toneladas,
un aumento importante, sin embargo estos 28 mil kilos son sólo
35000 kilos de mermelada final si se vendiera y utilizara todo
el producto. Nosotros, por lo muy menos esta temporada haremos
15 frascos. Serían 2 mil casas como la nuestra. ¡Nada!
Está
claro que no es un producto de consumo masivo y menos difundido.