Un ambiente marcado por
satisfacción y optimismo
reinó ayer en la junta de accionistas de Sipsa, en la cual los
hermanos Menéndez Ross proyectaron que éste será un
muy buen año para las operaciones que desarrollan en los sectores
naviero, inmobiliario y de servicios. Ello luego de que en 2004 la
compañía anotó una ganancia de $ 375 millones,
frente a las pérdidas por $ 4.268 millones de 2003.
Según informó el presidente de la empresa, Julio Menéndez
Ross, uno de los sectores más importantes en la operación
de Sipsa es el naviero, que desarrolla en cuatro grandes áreas
y en el que están invirtiendo US$ 105 millones.
Las empresas de Sipsa participan en el traslado
de petróleo
crudo y graneles, el negocio de buques que prestan apoyo a plataformas
petroleras, el transporte fluvial en la hidrovía que une Brasil,
Paraguay, Uruguay y Argentina y la movilización de pasajeros,
a través del buque New Flamenco –que adquirieron en US$
13,5 millones-, que navega por el mediterráneo y que tiene capacidad
para 800 personas.
En este sentido, Felipe Menéndez, director de la empresa, señaló que
se estudia construir un nuevo barco para estos fines, pero no precisó a
cuánto ascenderá la inversión. Acotó que
durante este año la facturación de la firma en el sector
naviero crecerá 30% y que “este es un momento de transformación,
en el que el desafío es diversificarnos, pero no perder el foco
de concentración en el área naviera, que es uno de los
rubros principales para Sipsa”.
Así se explica la cartera de inversiones por US$ 105 millones
que tiene la firma en este segmento, de los cuales US$ 45 millones
fueron aportados por los socios y US$ 70 millones obtenidos a través
de créditos bancarios.
La finalidad es construir seis barcos en astilleros
de Brasil y China, cuatro de los cuales comenzarían a funcionar este año.
Mientras, en el sector inmobiliario, Sipsa
maneja los proyectos Pilar del Este (600 hectáreas) en Argentina, además de Piedra
Roja (1.100 hectáreas) y Hacienda Chicureo (240 hectáreas)
en Chile.
Compañías pujantes
El presidente de la compañía comentó que la economía
argentina se ha ido consolidando y que este año el volumen de
ventas ha sido mucho mayor que en el primer cuatrimestre de 2004.
Además, Menéndez aseguró que están permanentemente
evaluando proyectos en el sector inmobiliario. “Tenemos compañías
pujantes, con direcciones ejecutivas pujantes, que están buscando
por todos lados crecer”, acotó, precisando que las iniciativas
pueden situarse tanto en Chile, como en Argentina, Estados Unidos,
Europa o Asia.
En la junta de ayer, la firma aumentó de 5 a 7 sus directores,
por lo que Fernando y Cristián Barros Tocornal, se sumaron a
la mesa integrada por Julio, Felipe y Ricardo Menéndez Ross,
además de Andrés Allende y Carlos Cáceres. En
la sesión también se acordó el pago de un dividendo
definitivo equivalente a 30,22% de las utilidades de 2004.
La apuesta en comida rápida
La franquicia de Lomito’n que posee Sipsa también abre
al grupo una vía de diversificación y la está explotando
a través de nuevos locales llamados Trópico, donde ofrecen
productos como panqueques y jugos naturales desde hace un mes.
El gerente general de Lomito’n, Rubén Cañas, señaló que
ya hay 2 locales con este formato, ubicados en los mall Plaza, los
que se suman a los 45 Lomito’n que operan en el país y
que además evalúan crear dos marcas adicionales.
La fórmula de Trópico la comenzaron a explorar en Argentina
tres meses antes que en Chile, para fortalecer su operación
en el vecino país, donde la crisis los obligó a cerrar
12 Lomito’n y ahora mantienen 8 funcionando.
Por ahora la compañía está concentrada en los
patios de comida, pero no descarta incursionar en una oferta más
elaboradas. Además, Cañas proyectó que las ventas
pasarán de unos US$ 15 millones en 2004 a US$ 18 millones este
año.
|