Con concierto coral y vino de honor:
La Comuna celebró sus 104 años con destacada participación de su Corporación Cultural.

Se podría suponer, dado el pequeño tamaño de la Comuna, que su Corporación Cultural sería a su vez pequeña o de poca importancia. Todo lo contrario. Sus actividades son incesantes y los resultados, sorprendentes.

La antigua Parroquia de Colina, destruida en el último gran terremoto, lentamente va mostrando su nueva fisionomía de Centro Cultural, mientras se recorre el lento camino a los 300 millones de pesos que significa su conservación.

Aún faltan 160 millones, más de la mitad, que se recolectan a traves de pequeñas subscripciones personales de donación mensual por menos de $1.000. Pero esto no ha sido inconveniente para que sus actividades den frutos extraordinarios: una Escuela de Música con más de 180 alumnos o un Coro de Cámara de notable calidad y profesionalismo.

Los 104 años de Colina se celebraron con un entretenido Concierto del Coro, que mostró un programa conciso de música sacra y popular latinoamericana, en el que sobresalieron las composiciones de los chilenos Vicente Bianchi, Víctor Jara y Raúl de Ramón.

Sobresalientes fueron, también, la participación de la pianista acompañante, Elizabeth Mendieta, sobre todo en la Cantata 147 de Bach, y del tenor Giovanni Gómez en un Solo que demostró su excepcional talento. Tenemos entendido que Giovanni fue "descubierto" cuando ingresó a trabajar a la Corporación como Junior.

El Vino de Honor siguiente excedió cualquier expectativa. Con vinos blanco y tinto, pisco sour, Ponche a la Romana y jugos acompañados de empanadas de horno, sandwiches en pan amasado, anticuchos y tortas, se dio ambiente a una reunión relajada e interesante, donde pudieron compartir impresiones diferentes tipos de vecinos con concejales y autoridades comunales.

Nuestros agradecimientos al Alcalde por su invitación y a la Corporación Cultural por su notable labor.

Himno de Colina.

texto: Manuel Rojas del Río (nuestro Alcalde)
música: Juan Pablo Rojas S. (su hijo).

Es Colina la tierra bendita
donde puso su mano el Señor,
cultivando sus campos floridos
en los Andes con nieves y sol.

Chacabuco campiñas doradas
en la historia su nombre grabó,
y sus termas famosas derraman
en Peldehue sus aguas de amor.

Como ayer venceremos de nuevo
al que ignore nuestra identidad
nuestros hijos serán el baluarte
que nos lleve de nuevo a triunfar.

Siempre unidos las manos juntemos
que el progreso es la meta final,
sólo en Dios la justicia hallaremos,
el amor, nuestra fe, nuestro afán...
el amor, nuestra fe, nuestro afán.