El
estado actual de las investigaciones y descubrimientos
en torno a la Sábana Santa de Turín es bastante más
complejo de lo que algunos pretenden hacernos creer.
Para algunos medios de "información" parece que todo
lo que se sabe de la Santa Síndone empieza y acaba
en la rueda de prensa del 13 de Octubre de 1988, en
la que el Cardenal Ballestrero hizo público el resultado
de la datación por el método del Carbono 14.
Los
titulares de algunas publicaciones de aquellos días
(y la propia TVE) llegaron a decir que la Santa Sede
reconocía oficialmente que la Síndone era una falsificación
medieval. Bastaría repasar la declaración oficial
efectuada por el, entonces, Obispo de Turín para ver
que tal cosa no puede deducirse de sus palabras. Es
más, posteriormente (el 28 de Abril de 1989) S.S.
Juan Pablo II en una rueda de prensa improvisada a
bordo del avión en su viaje a Madagascar rechazó que
la Síndone pueda considerarse como un simple icono:
"La Iglesia nunca se ha pronunciado en este sentido.
Siempre ha dejado la cuestión abierta a todos aquellos
que quieran demostrar su autenticidad. Yo creo que
es una reliquia."
Consecuentemente
con esta posición, se han organizado dos ostensiones
(exposiciones públicas) de la Sábana Santa en fechas
próximas; del 18 de Abril al 31 de Mayo de 1998 y
del 29 de Abril al 11 de Junio del año 2000. La anterior
ostensión, que coincidió casualmente con el último
cónclave, fue realizada en 1978 y reunió a más de
3.000.000 de personas en la Catedral de Turín en cuarenta
y dos días.
No
hay, por tanto, cambio alguno respecto a la posición
tradicional de la Iglesia. Nunca se ha pedido a los
católicos que piensen de una determinada manera en
este tema, que no es dogma de fe, ahora tampoco. Sin
embargo, para opinar es necesario conocer lo que la
ciencia ha venido diciéndonos en los últimos tiempos
sobre la Síndone de Turín. Todo ello sigue siendo
verdad.